LOS VERDADEROS ENEMIGOS DEL MUNDIALISMO NO SON LOS ESTADOS SINO LAS ETNIAS Mientras el mundialismo repugna las fronteras entre "naciones" (estados) y entre razas, los separatistas progres repugnan las fronteras entre razas, pero no entre "naciones" (estados) y los nacionalistas españolistas homogeneizadores repugnan las fronteras entre étnias hispánicas, pero no entre razas, ni entre "naciones" (estados). Sin embargo, es la destrucción de las etnias lo que desestructura internamente a las razas, rompiendo con ello, entre otras cosas, el lazo social en sus cimientos y propiciando asi el individualismo e, indirectamente, la potencial mezcolanza con razas exóticas, para, finalmente, despojar a las "naciones" de su razón de ser, la cual, sin embargo, debiera pasar necesariamente por la preservación de las etnias. Aquí se ve como los jacobinos homogeneizadores constituyen el principio del mal. En realidad, desde los partidos llamados pat