La Segunda Guerra Mundial nos ha enseñado que la propaganda de
atrocidades, esgrimida hábilmente por los especialistas aliados sobre el
tema, tuvo un valor fundamental y decisivo a la hora de ganar la
batalla definitiva, la ideológica. Así fue, los alemanes son los malos y
los judíos inocentes criaturas: esto es lo que ha quedado y lo que, aún
hoy, por mucho tiempo todavía, ha marcado ideológicamente a las nuevas
generaciones.
Un lema de las viejas guardias de militantes comunistas decía: "contra
las almas la mentira". Y parece que, sin quedar el lema, quedó la idea.
Se ha mentido, se miente descaradamente, no ya sobre cuestiones de
actualidad política, sino sobre temas que la historia aún no puede
aceptar como definitivos, porque muy pocos son los que quieren colaborar
a escribirla seriamente y muchos los que la utilizan como arma
política. Gernika es un caso típico de arma propagandística. La verdad
no importa.
Los Usinkel He 111 de la Luftwaffe, culpables, según la leyenda, de la
"masacre" de Gernika. Responsables, según la historia, de atacar un
objetivo militar cercano a la ciudad.
Muchos historiadores de suficiente categoría han intentado desvelar lo
que hay de falso y verdad en el Mito de Gernika. Unos y otros, en mayor o
menor grado, barren para casa, quizá de forma inconsciente. Pero todos,
en conjunto, han conseguido dejar bastante claro el asunto. Gernika fue
destruida, de alguna manera, el 26 de abril de 1937, las fotos son
elocuentes por sí mismas. ¿Cómo y por qué?. Gernika formaba parte
importante en la línea defensiva del Norte, una vez rebasado el frente Urduña-Otxandiano-Vergara, se convirtió en paso de ataque y ruptura del
"cinturón de hierro" de Bilbo, como puede verse claramente en el mapa
adjunto (1)
El mismo Adolf Galland, capitán de escuadrilla en un grupo
de caza y participante directo en el ataque a Gernika, dice: "En los
primeros meses de su intervención, los bombarderos Cóndor habían
recibido la orden de destruir un puente de Carretera por el cual los
rojos transportaban sus tropas y grandes cantidades de material de
guerra, a la tenazmente defendida ciudad industrial y portuaria de
Bilbao."(2) Luego volveremos sobre el relato del piloto nacionalsocialista pero, de
momento, queda bastante claro que la orden fue atacar la carretera y un
puente, objetivos tácticos estrictamente militares, y no, como pretenden
algunos, incluido Ricardo de la Cierva, un ataque premeditado contra la
ciudad, que sirviera de ensayo para futuros bombardeos masivos .(3) Indalecio Prieto, jefe socialista y Ministro de Defensa de la República,
comunicó por teletipo al General Vicente Rojo, que se hallaba en el
frente, sus impresiones sobre los ataques aéreos de los sublevados:
“El sistema de ataque seguido ahí por el enemigo es exactamente el mismo
que en el Norte, y de modo muy singular en Vizcaya, donde la aviación
efectuó ataques bastante profundos en la retaguardia, entre los cuales
descollan los de Durango y Gernika, cortando además todas las
comunicaciones, pues mantenía su ametrallamiento casi constante sobre
las carreteras, destruyendo o deteriorando toda clase de vehículos,
incluso rnotocicletas.”. (4) Aquí, Prieto declaró, evidentemente, que el ataque era contra objetivos
militares, y confirma los daños sufridos, cosa que él sabría
perfectamente corno Ministro de Defensa. Después vino la creación del
Mito y Prieto confeccionaría, desde México, su famoso documento
lloriqueante por el asesinato de Gernika.
Gernika, el 26 de abril de 1937. ¿Humo de bombas o de incendios?
Probablemente las dos cosas. El histórico árbol y la casa de juntas
quedaron extrañamente intactos.
Los aviones de la Cóndor no ametrallaban a los refugiados que huían del
bombardeo, ni a los ancianos y niños amontonados en los arbolados y
carreteras, como escribe Ricardo de la Cierva según declaraciones de Don
Alberto de Onaindia (5) Esto no lo digo yo, lo dice el socialista
Prieto y el nacionalsocialista Galland, ambos participantes directos en
la acción.
Gernika fue ocupada por tropas rojas el 25 de abril de 1937, el 26 tuvo lugar su destrucción, y el 29 a las once de la mañana la ocupaban tropas sublevadas de las Brigadas Navarras del Ejército del Norte. Un despacho del VI Cuerpo de Ejercito, fechado el 28, señala: "Continuó el avance, alcanzándose por último la villa de Durango que fue bombardeada y ocupada tras vencer tenaz resistencia que ofreció el enemigo ayudado por tanques rusos. La espesa niebla que descendió sobre los valles impidió continuar el avance de nuestras tropas, deseosas de entrar en Gernika al conocer por fotografías de aviación que el enemigo había evacuado la población destruyéndola criminalmente, culpando de ello a nuestras fuerzas aéreas, especie calumniosa que queda rebatida al ver que no hay en la ciudad un solo embudo de bombas de aviación.“ (6) Aquí ya se habla de los embudos de bombas, que tocarán diversos autores. Pero lo que quería, era demostrar que Gernika era frente de combate y objetivo de las tropas sublevadas en su marcha hacia Bilbo y no, como se ha pretendido, un objetivo civil sin importancia militar sobre la que se distrajeron las pruebas criminales de la futura Luftwaffe.
Si Gernika era o no objetivo militar, vuelven a confirmarlo, aún
tratándose de una obra novelada, Gordon Thomas y Morgan Witts en su
libro "El día en que murió Guernica", pues desde el lado favorable al
gobierno de Bilbo, admiten el claro interés militar de la villa. Los
mismos autores reconocen que el día 26, día de la destrucción, no era un
idílico lunes de mercado corno se ha dicho. Reconocen que Lazcano,
delegado gubernativo, llegó a Gernika el día 26 de abril de 1937 por la
mañana y prohibió el partido de pelota y el mercado, y comenzó a
preparar la evacuación de la villa, antes de que nadie tuviera idea de
que por la tarde vendrían aparatos de la aviación sublevada. ¿Por
qué, pues, obligar a la población a abandonar sus casas? Gernika, además, "había sido elegida como punto de detención de la
retirada del frente oriental" (7) Creo que es motivo suficiente para
considerar a Gernika objetivo militar, si la fábrica de armas Unceta, no
era suficiente.
EL BOMBARDEO
Sí, aparatos sublevados, tres trimotores italianos y los aviones de la Cóndor, descargaron bombas sobre puntos concretos de la ciudad y sus alrededores. Según el artículo aparecido en una revista española, comentando el libro de Thomas y Morgan Whits. (8), se emplearon "43 bombarderos pesados: cuatro Heinkels, veintitrés Junkers, diez He-51 y seis Messerschmitts Bf 109". ¡¡Cuarenta y tres aparatos!!. Sumemos los trimotores italianos y tendremos ¡cuarenta y seis bombarderos!!. Sir Arthur Harris, responsable del "bomber Command" encargado de convertir Europa en una alfombra, aún se estaría desmontando de risa si le hablaran de 46 bombarderos. Pero, además, los diez Heinkels He 51 que se citan, no eran bombarderos, sino aparatos de caza, monoplaza y biplano, ya anticuado para su época.
Aceptemos, sin embargo, que llevasen, como ocurría a veces, seis
pequeñas bombas de 10 kilos o cuatro de 50 kgs. Los Messerschmitts Bf
109 eran igualmente aparatos de caza, y no bombarderos pesados.
Admitamos, sin embargo, que llevaban también una bomba bajo el vientre. Y
los "pesadísimos" Heinkels He 111 y Junkers Ju 52 que actuaron en la guerra española, tenían una capacidad máxima de 1.500 y 1.665 kilos cada uno
respectivamente (9). Desde luego, lo que está claro es que la versión
de: "sobre Gernika cayeron en la tarde del 26-4-37, 1.000 explosívas y
3.000 incendiarias –bombas -" es falsa (9 bis). La situación de Gernika en el avance para romper el “cinturón de hierro” de Bilbao.
Cuarenta y tres aparatos "pesados" de la legión Cóndor, de los que hay
que descontar, como tales, los 16 aparatos de caza y escolta (He 51 y Bf
109). Lo que hace un total de 27 aparatos (Ventitrés Ju 52 y cuatro He
111). 27 aparatos que, corno máximo, podían transportar el
equivalente a tres bombas de 500 kgs cada uno, lo que hace un total de
¡¡Quince bombas de 500 kilos!!. Añadamos que entre los cazas Bf 109 y He
51, se transportaran, además, un máximo de dieciséis bombas de 10 kgs y
seis de cincuenta. ¡Que espanto!. La Grand Slam, utilizada normalmente
por las fuerzas aéreas aliadas para bombardear ciudades alemanas, pesaba
sus buenas 22.000 libras (la miseria de nueve toneladas), cada una
claro, y las bombas de 1.000 kilos eran el pan de cada día. Las de 500,
eran utilizadas para cualquier acción militar táctica. Según un artículo
aparecido en la Vanguardia (9 bis), ha sido hallada en Gernika, por una
excavadora que trabajaba en los cimientos de un nuevo edificio, una
bomba de fabricación alemana de 250 kilos. Sabernos así, el tipo de
bomba utilizado, es decir, en vez de quince de 500 kilos, treinta de 250
kgs, lo que más o menos, es lo mismo. Estas son las "superbombas" que,
según la propaganda comunista los alemanes utilizaban en la guerra civil española. Los
aliados utilizaban este cargamento para destruir una sola manzana de
cualquier ciudad alemana, o para el primer segundo de ataque sobre
Montecasino, el más intenso de la guerra.
¿Porqué me refiero siempre a los bombardeos aliados?, se preguntarán algunos. Les diré, para su información, que a lo largo de toda la guerra, los bombardeos de toda Inglaterra, incluidos los ataques a Coventry, Londres y Liverpool, los bimotores alemanes produjeron unas 25.000 víctimas. Sir Arthur Harris, habla de 43.000 (10). Cifra que, en Alemania, producían los cuatrimotores aliados en una sola noche sobre cualquier ciudad mediante las famosas "tormentas de fuego". Digo todo esto, para que nos hagamos una idea, de a qué niveles nos movemos al hablar del tan cacareado "desastre de Gernika", con sus 30 bombas pesadas, 27 bombarderos y 100 ó máximo, 300 víctimas.
"En la fase previa del bombardeo participaron tres trimotores Savoia 79 que partieron del lejano aeródromo de Soria. Esta formación, antes de despegar, recibió la siguiente advertencia: "Il paese per evidenti ragione politiche non deve essere bombardato" (10 bis). Esta misma advertencia fue hecha a las unidades alemanas y sublevadas, ya que el Estado Mayor de la Legión Cóndor era el organismo que distribuía las ordenes a las escuadrillas italianas y españolas que operaban en el frente vasco. Si los pilotos hubiesen actuado por cuenta propia, habrían sido juzgados en un consejo de guerra.
"El bombardeo de Gernika fue experimental", dicen tantos y se quedan tan anchos. Bueno, como todo lo que hacía la Cóndor en España, porque todo lo realizado en combate sirvió para sacar experiencias útiles para la Luftwaffe, pero esto no quiere decir nada, ni siquiera que fuera un bombardeo contra civiles, como parece ser que se esgrime. Fue un bombardeo militar, contra objetivos militares en primera línea del frente, con la misión de destruir posibilidades bélicas del enemigo.
"La verdad, es que una bomba de los franquistas cayó por accidente en la ciudad, produciendo algunos daños, pero provocando la salida de la guarnición republicana, y fueron los izquierdistas, al salir de la población, los que incendiaron y causaron destrozos". Esto dice el historiador mexicano José Vasconcelos (11). Pongamos, corno debió ocurrir efectivamente, que en vez de una fueran diez (no muchas más dado el cargamento que llevaban corno hemos demostrado), y que el resto cayó donde debían caer, la estación del ferrocarril, la fábrica de armas Astra-Unceta, el puente y la carretera, objetivos de la legión Cóndor, los aparatos italianos y sublevados. De esta decena de posibles bombas caídas sobre la población, se produjeron algo menos de un centenar de víctimas, una cifra comprobada rigurosamente, que puede ser ampliada a 200, según unos (11 bis), 250 según otros (11 bis), e incluso 300. Hagamos un tanto por ciento entre los 100 y los 300, y dejémoslo en 200, sobre una población de 5.000 habitantes. Esto mismo ocurrió sobre otras muchas ciudades españolas. Era la guerra, fuera de quien fuera la culpa, y en la guerra muere gente. Noventa y ocho, cien, o doscientas personas, eran un tributo más de los millones de almas que, desde 1936 hasta diez años más tarde, se cobrarían para imponer la democracia, liberal o "popular", en el globo.
Se ha utilizado una declaración del Mariscal Göring en el teatro montado por los servicios de propaganda aliados en Nuremberg, para querer confirmar una "masacre" de Gernika, malintencionada y preparada aposta. Se han declarado sobre Nuremberg muchas cosas que nunca fueron declaradas -, que a los interrogatorios de los Srs Maier y Sender, del Servicio de Investigación británico, sobre Gernika, Göring contestó: "Fue una especie de banco de pruebas de la Luftwaffe". Esto se ha querido traducir por algo así como: el bombardeo contra civiles, falaz y malintencionado y la masacre por parte de la Cóndor fue una especie de banco de pruebas... Nada tiene que ver, creo yo, una cosa con la otra. España entera y su guerra civil, fue una especie de banco de pruebas para la Luftwaffe, que ganó pilotos entrenados en combate real y probó el nuevo material. Los hombres del interrogatorio aludieron a los niños y mujeres muertos en Gernika, y parece ser que Göring contestó que si bien era lamentable, nada podía hacerse para evitarlo. Una contestación que me parece lo más normal en el Jefe de una fuerza aérea que ha pasado toda una contienda gigantesca y que ha quedado suficientemente horrorizado con sus propias ciudades, convertidas en verdaderas piras humanas, además, Göring no hizo más que aceptar la posibilidad de que, como ocurría tan a menudo, en un bombardeo militar cayeran también civiles, nada más.
En torno al hecho de que edificios civiles de la ciudad fueran destruidos por las bombas, Galland, declara: "El ataque se verificó bajo malas condiciones de visibilidad, con aparatos de puntería primitivos. Al disiparse las columnas de humo de las bombas arrojadas por las escuadrillas, se comprobó que el puente había quedado indemne, pero que en cambio la localidad situada a su lado, había sufrido considerables daños. También habían sido destruidos los depósitos de material de guerra del enemigo, pero en conjunto la acción podía considerarse un fracaso, tanto más cuando el objetivo de nuestras operaciones consistía en lograr la destrucción del enemigo, respetando especialmente a la población civil”. (12).
Galland continua, y aquí vemos que el Mito de Gernika ya había empezado a ser propagado: “Se había logrado lo contrario en el ataque al puente de la carretera de Gernika y precisamente entonces, en el instante de mi llegada a España, esto era motivo de abatimiento entre las filas de la Legión. Los legionarios no gustaban de hablar de Gernika. En cambio el bando contrario lo hizo hasta por los codos y los rojos extrajeron de aquel infortunado suceso considerable beneficio propagandístico. En realidad, ni era ciudad abierta, ni tampoco fue destruida.”
Pese a esta franca declaración de Galland, Brian Crozier, escribe: “Pobre Galland. Sin saberlo, él mismo era víctima de la propaganda roja. No sabía, porque no se habló de ello en la prensa, que los aviadores a sus órdenes, con sus primitivos puntos de mira, habían conseguido el milagro de destruir exactamente tres cuartas partes de la pequeña ciudad vasca, dejando intactos los edificios ofíciales y el famoso árbol" (13).
Digamos, para aclarar mejor las cosas, que las columnas de humo sobre las que la Cóndor arrojó bombas, podían ser causadas, bien por aparatos que llegaran antes que el grupo de aparatos, o bien, como apareció publicado recientemente de manos de un vasco que luchó con los sublevados, de los primeros incendios provocados.
Aquí empieza la otra gran verdad, la de que Gernika fue incendiada, también, por las tropas de ocupación republicanas. Gernika, que no era ciudad abierta, fue bombardeada por error y de forma aislada por un mínimo de bombas.
GERNIKA, DINAMITADA
Hemos aceptado, tras un estudio de todas las versiones y probabilidades, que cayeron algunas bombas sobre la ciudad. No es exactamente lo que defiende la propaganda democrática, pero la historia no da más de sí, deberán conformarse con algunas bombas por error, y nada más.
Pero, del mismo modo, la historia acepta hechos comprobables. Las tropas rojas incendiaron Gernika y consumaron su verdadera destrucción total, evacuando con anterioridad a la población. El Coronel José Gomá, en una obra escrita como militar, declara: "La Brigada de Navarra, la que había abierto el camino, entraba en Durango, protegida por la aviación Se ocupó Gernika, volada por los marxistas en su retirada." (14)
Es interesante la declaración del General Martínez Esparza (15), sobre la detención de un motorista enemigo, en el diario de operaciones: “va a Marquina a llevar una orden para que las fuerzas que ocupan dicha población se retiren sobra Gernika y se unan a la defensa de esta Villa, donde se nos comunica que está llegando una división enemiga procedente de Bilbao. Nos adelantamos en nuestro coche hasta los carros y contemplamos el grandioso espectáculo de Gernika, en cuya estación de ferrocarril de Pedernales se encuentra un tren militar que acaba de llegar trayendo fuerzas...”
Una prueba evidente, otra, de que Gernika era punto fuerte en la línea de combate. El Diario de operaciones de la Cuarta Brigada de Navarra, unidad que ocupó Gernika el 29 de abril, dice textualmente: “La Brigada, continuando su avance, ha ocupado hoy Uarca, cota 189, Rentería, Ajanguiz, Gernika, Luno y Monte Aiserrota. Gernika se halla casi desierta y aparece totalmente destruida; lo poco que queda en pie al dar el parte está aún ardiendo. El Arbol y sus dependencias han quedado bajo custodia de una compañía de Requetes de Navarra... se han presentado muchísimos paisanos y familias que se dirigen hacia Gernika ya liberada, presenciándose escenas tristísimas al encontrarse estos con sus casas destruidas totalmente o totalmente saqueadas.” (16)
Otro parte, en este caso del Ejercito del Norte del 28 de abril, dice: “Fugitivos vascos cuentan espantados la tragedia de villas como Gernika, quemada y destruida casi totalmente por el fuego intencionado de los rojos, estando nuestras tropas a más de quince kilómetros de distancia... tras incendiar sus mejores ciudades intentan culpar a la aviación nacional de tales actos de barbarie... Gernika no constituía objetivo militar para la aviación nacional..." "Al decir este parte que Gernika no constituía un objetivo militar se refiere naturalmente al núcleo urbano, y no a la estación del ferrocarril, fábrica de armas y cruce de carreteras". Esto dice Luis Bolín en su obra (17), y hace una interesante indicación. Ninguno de estos partes estaba destinado a publicidad. Indican solamente lo que se vio y se hizo en marcha sobre el frente de combate. Eran diarios de operaciones y no propaganda del bando nacional.
Lo más curioso de las destrucciones que tantos edificios arrasaron, es que respetaron, casualmente, el Arbol de Gernika y construcciones adjuntas, lo que hubiera sido imposible si tales destrozos se hubiesen efectuado desde el aire. Los que destrozaron Gernika, cuidaron de dañar el árbol por el que tantos, del bando sublevado y gubernamental, sentían gran admiración.
Dos magistrados y dos ingenieros del bando sublevado, redactaron un
informe sobre la destrucción de Gernika, llegando a las siguientes
conclusiones:
"Primero Gernika fue ocupada por las tropas vascas el 25 de abril.
Segundo, aquel día el mercado se encontraba poco concurrido y provisto,
pues los vecinos habían sido avisados de una "inminente destrucción".
Tercero, la ciudad fue bombardeada intermitentemente por aviones, siendo
las bajas inferiores al centenar. Cuarta, la ciudad fue destruida por
los rojos que estaban en su interior, incendiándola". Conclusiones
realizadas por técnicos y que asombran por su neutralidad en el asunto,
que dan, además, un resumen muy aproximado a la verdad total.
Transcribimos a continuación un artículo del General Martínez Esparza, publicado en la revista Ejército sobre sus recuerdos de la ocupación de Gernika:
"Gernika tal como la encontraron las tropas nacionales. Los guerniqueses
se quedaron sin casas. Los nacionales con un crimen a sus espaldas, y la
legión Cóndor sin destruir su objetivo- el puente -. ¿Quién ha salido
beneficiado de todo esto?
“En el atrio de un edificio religioso hallamos dos personajes bien
portados, que manifestaron ser un diputado nacionalista vasco y un
periodista francés. Trataban de hacer una información sobre la
destrucción de Gernika para llevarla al extranjero, queriendo demostrar
era debida a la aviación nacional. Gernika tiene, entre otras
industrias, una fábrica de armas (morteros y pistolas), que había sido
bombardeada por la aviación nacional para evitar la continuación de sus
tareas, como fue bombardeada la estación para evitar el transporte de
las armas que se fabricaban. Pero en la destrucción de Gernika se
apreciaban claramente dos clases distintas de ruinas, las resultantes de
bombardear el sector de la estación y fábrica de armas y la que, con
fines políticos, habían sido causadas mucho más recientemente, siendo
consecuencia del intencionado incendio y empleo de la dinamita ordenado
por el Gobierno rojo. Ellos no contaban con que nuestra ocupación fuese
tan rápida, y por eso había restos humeantes del incendio y se veían los
hornillos para la dinamita, algunos en los pisos más altos de los
edificios. Tanto nos anticipamos, que pudimos capturar al periodista
francés que había de ser testigo interesado de la destrucción y al
diputado vasco que le acompañaba en esta misión, conducente a restar
simpatía a nuestra causa en el exterior.” (18)
Brian Crozier menciona la declaración de un testigo presencial llegado a Gernika dos o tres días después de su destrucción:
“...se había fijado en un hecho esencial: la población había quedado
arrasada en sus tres cuartas partes, pero el árbol en que se encontraba
el árbol sagrado, el Consejo Vasco y la Iglesia Santa María la Antigua,
había quedado intacto... “se advertía que – fuera por la razón que
fuese- quienes habían destruido Gernika respetaron los lugares sagrados
del pueblo vasco, aunque no mostraron igual respeto hacia las viviendas
de sus habitantes.” (20)
Crozier, autor británico anti-NS, habla de ciertos telegramas encontrados en los archivos secretos de la Wilhelmstrasse:
“... me asombre al advertir el estupor que aquellos telegramas
reflejaban. Era evidente que los alemanes, nada sabían del asunto de
Gernika, y teniendo en cuenta el carácter secreto de aquellos
telegramas, es decir, que no estaban destinados a ser publicados en el
transcurso de muchos años, no había razón alguna para ocultar o falsear
la verdad en ellos... concluí que, con toda probabilidad, los nazis, a
pesar de las muchas atrocidades de que eran responsables, no fueron los
culpables de la destrucción de Gernika" (21)
Existe otra declaración que menciona Crozier, la de un ex-parlamentario y Wing Commander de la RAF, el Coronel Sir Archibald James. Este visitó España nueve veces durante la guerra civil. En una ocasión se detuvo en Gernika, justo cuando acababa de leer el famoso telegrama del corresponsal del "Times" de Londres, Georg Lowther Steer, en que daba la terrible noticia de la destrucción de Gernika y la matanza de su población a cargo de aviones NS, con los famosos grandes titulares: "La Ciudad abierta de Gernika bombardeada por aviones boches". Sir Archibald James, averiguó, entre otras cosas, que el corresponsal del Times, Steer, jamás estuvo en Gernika, y se fijó en el hecho interesante de que Gernika había sido quemada sistemáticamente hasta el nivel del suelo y que su destrucción era absolutamente uniforme. El Coronel de aviación británico añade textualmente:
“Uno de los escasos habitantes todavía presentes, me dijo que algunos aviones habían volado por encima de la población y que habían arrojado bombas. Por este me puse a buscar cráteres, pero no halló señal alguna de daños causados por bombardeo. Con esto no quiera decir que no pudiera haber rastros de bombardeo, ya que hubiera sido difícil descubrir cráteres pequeños. De todas maneras, no conseguí encontrar cráteres grandes, ni huellas evidentes de los efectos de las explosiones. Recorrí la ciudad dos o tres veces y, sí, encontré aproximadamente una docena de cráteres de bombas, a un centenar de metros del perímetro de la ciudad. Todas las bombas eran del tipo que, en la primera guerra mundial, hubiéramos calificado como de diez kilos. Lo verdaderamente revelador de la destrucción consistía en que el cuadrante noroeste, donde se encontraba la alcaldía, precioso edificio medieval, la encina sagrada y la catedral, estaba intacto. Ni una sola señal de daños de género alguno. En los tres cuadrantes restantes la destrucción era, como he dicho antes, completamente uniforme y causada por el fuego. Si los daños hubieran sido causados por bombardeo aéreo - con bombas explosivas o bombas incendiarias -, resultaría totalmente inconcebible que la precisión de los bombarderos fuera tal que hubiera dejado aquellos límites de la destrucción, es decir, un cuadrante intacto." (22).
Esta declaración tiene tanto más interés por cuanto las observaciones están hechas como profesional, es decir Wing Commander de la RAF, un aviador consumado. Existe un informe, sobre el que no vamos a extendernos, del bando sublevado pero que hace algunas indicaciones técnicas de interés. En dicho informe, se atribuye la mayor parte de la destrucción de la villa a explosiones subterráneas en nueve sitios distintos, todos ellos contiguos a salidas de aire o respiraderos del alcantarillado. Aceptando esta tesis, queda desechada toda idea de un bombardeo masivo, dado que, como dice Sir Archibald James y el mismo Galland, los medios de puntería aérea en 1937 eran tan rudimentarios, que hubiera sido asombroso o imposible que los pilotos alemanes colocaran sus proyectiles con una precisión sin precedentes exactamente en cada uno de los nueve respiraderos del alcantarillado de la ciudad.
El citado autor británico, hace una interesante aportación cronológica.
Según casi todas las versiones, los aparatos de la Cóndor aparecieron
sobre Gernika alrededor de las 16'30 del día 26 de Abril y
desaparecieron los últimos a eso de las 7'45. Crozier comenta:
"Varios testigos declararon que oyeron explosiones durante la noche del
26 al 27. Y todos los testigos están de acuerdo en que, una vez entrada
la noche, no volaron aviones sobre la ciudad. Otros testigos afirman que
a las ocho de la tarde del día 26 solo ardía una cuarta parte de la
ciudad, que la milicia republicana no permitía se luchara contra las
llamas, y que varias casas no comenzaron a arder hasta el día 27 o el 28
y, en un caso, hasta el 29." (23)
Por tanto, según esto, el bombardeo debió estar encantado, pues sus
efectos destructivos e incendiarios se dieron mucho después de que el
último aparato desapareciera. El mismo, menciona la obra de Herbert Southwort "La destrucción de
Guernica", un norteamericano que cita un fragmento del informe oficial sublevado:
"Durante tres horas y media, y a lo largo de la noche siguiente, los
habitantes de Gernika oyeron explosiones ensordecedoras que estallaron
en la ciudad... las explosiones oídas en la ciudad por los habitantes de
Gernika fueron causadas por detonaciones de dinamita en las
alcantarillas y en otras partes de la ciudad según planes previos del
gobierno vasco.” (25)
Según declaraciones recogidas por el mismo autor, diversos testigos que menciona con nombres y apellidos, confirman que por la noche del mismo día 26, a partir de las 10 u 11 de la noche, se oyeron explosiones en el interior de la ciudad y que continuaron hasta el alba que, según otro testigo, se oían a algunos kilómetros de la ciudad. Explosiones que, señala, no podían ser debidas a bombas incendiarias con defectos de fabricación, por la sencilla razón de que las bombas incendiarias no explotan. El fuego hubiera podido extinguirse al atardecer del día 26. Pero no se hizo, cabe suponer que debido a que las autoridades republicanas tenían intención de proseguir deliberadamente la destrucción de la ciudad. De ahí las explosiones nocturnas. (24)
Si la organización y tradición de fidelidad germánica vale de algo, diremos que según el Rügen, Departamento para el Estudio de Resultados, órgano dedicado al archivo de información y obtención de datos de ataques realizados para su aprovechamiento en posteriores operaciones, la acción de la Legión Cóndor sobre Gernika que tuvo lugar el día 26 de abril, tenía como objetivo el puente del cruce de la carretera oeste, participaron 9 aparatos que volaban a una altura de 2.300 mts, realizaron un vuelo único y lanzaron 9 bombas de 250 kilos y 114 de 50 kilos, sumando un total de 7.950 Kgs, el ataque se inició a las 16'30 y tuvo una duración aproximada de 3 horas. (28)
Según Wilfred von Oven (31), el Mito de Gernika a nivel internacional, fue montado en gigantesco tinglado por el judío Willi Münzenberg, agente soviético residente en París. (29)
En general, creo que con lo dicho podemos sacar algunas conclusiones.
Gernika, que era lugar de paso en el avance de las tropas franquistas, era un objetivo militar entre otras cosas, por las tropas que albergaba por lo menos el día 26 y porque se había decidido como punto de retención de la retirada del frente oriental, lo era igualmente, porque la carretera, puente y ferrocarril servían para el transporte de armas y tropas.
Aviones del bando nacional bombardearon la carretera, el puente y la estación del ferrocarril, causando destrozos en algunos edificios contiguos a sus objetivos debido a la mala visibilidad y la falta de precisión de los instrumentos de la época.
El Gobierno republicano ordenó el incendio y destrucción de Gernika siguiendo el principio de la "tierra quemada" soviético, cosa que realizaron tropas republicanas.
Mientras el bombardeo de Gernika fue una misión exclusivamente militar, destinada a la destrucción de potencial bélico enemigo; la destrucción total de la villa fue una acción política con la intención de combatir ideológicamente al enemigo y crear propaganda de atrocidades desfavorable a éste.
Versiones noveladas como la de Morgan y Witts (coinciden en ello los más serios), quieren afirmar que no fueron 100 ni 250 las víctimas, sino varios millares de muertos y heridos (26), otros hablan de una orden premeditada de Franco por su odio contra los vascos, otros que la legión Cóndor empezó en Gernika a probar sus premeditados bombardeos masivos de la II Guerra Mundial - que nunca tuvieron lugar como hoy se conciben -.
A modo de anécdota, diremos que el famoso "Gernika" (27) de Picasso ya había sido encargado y comenzada su realización antes de la destrucción de la villa. Al malagueño sólo le faltaba un bombardeo.
Para finalizar, después de este largo análisis centrado en un único bombardeo y en un único bando, es justo realizar un breve repaso sobre el resto de atrocidades cometidas por las demás partes. Durante la Guerra Civil española murieron, se dice, un millón de personas. Durante la II Guerra Mundial fueron 52 millones las víctimas del provocado desastre internacional. Pero, por primera vez en la historia, la guerra se convirtió en crimen organizado y, los Estados aliados enviaban soldados, no a combatir contra soldados, sino a asesinar civiles. La brutal masacre de los pueblos, ciudades y monumentos europeos fue total. Sólo para hacerse una idea diremos, que de los nueve millones de desaparecidos por parte alemana, por poner un ejemplo, la mitad correspondía a civiles en gran parte masacrados por los bombardeos terroristas. Colonia, Hamburgo, Berlín, Nuremberg, Munich... Hiroshíma, con sus 80.000 víctimas fue un hecho salvaje. Pero más lo fue Dresden y sus más de 250.000 mujeres y niños, ancianos y enfermos, que como ciudad libre, se hallaban bajo el infierno de dos flotas aliadas, la británica y la norteamericana, que una tras otra, convirtieron la bella capital de Sajonia en una verdadera pira humana en amasijo con los cascotes y las bombas de fósforo. Un crimen horrendo, por el que nadie ha sido todavía juzgado.
Las cifras dadas por el censo de víctimas señalan las bajas del bombardeo de Gernika por debajo del centenar. Las cifras más altas hablan de 300 víctimas (30). ¡¡¡Trescientas!!! frente a decenas de miles, centenares de millares. Una pequeña formación de 53 aparatos - Castor de Uriarte habla de dieciseis (31) - de caza y bombardeo táctico contra un objetivo militar e industrial, frente a los 1.000 bombarderos, por ejemplo, de la masacre de Colonia, frente a inmensas fuerzas aéreas estratégicas dirigidas exclusivamente a destruir ciudades y aniquilar civiles.
¿Alguien ha oído hablar de libros, artículos, grandes despliegues propagandísticos o cuadros sobre Duisburg, Coventry, Colonia o Dresden? El mundo entero habla de la "masacre" de Gernika, de la maldad intrínseca de los responsables de la destrucción de la villa, de "Gernika" - ahí está lo interesante- de Picasso, un buen pintor que prefirió hacerse millonario, ser adulado, y convertirse en un mamarracho propagandista de sus patrones, a seguir siendo un artista y pasar al podium de los grandes pintores, de los de verdad. Nada se ha dicho porque sobre estas ciudades no interesaba hablar.
"Franco, evidentemente, consideraba que su intervención valía un precio
elevado. Sin embargo, pienso que, a despecho del sabotaje sistemático de
su cuñado jesuítico, hubiese aceptado acompañarnos en nuestra empresa
en condiciones razonables: la promesa de algún pedacito de Francia para
la satisfacción de su orgullo, y un trozo substancial de Argelia para el
interés material: Pero como España no podía aportarnos nada tangible,
he juzgado que su intervención directa en el conflicto no era deseable.
Por supuesto que ello nos hubiera permitido ocupar Gibraltar. Pero, por
otra parte, constituía la certeza de añadirnos kilómetros de costas que
defender sobre el Atlántico, desde San Sebastián hasta Cádiz. Y,
suplementariamente, con esta consecuencia posible: la renovación de la
guerra civil, suscitada por los ingleses. En esa forma, nos hubiésemos
encontrado ligados a la vida y a la muerte de un régimen que, menos que
nunca, goza de mi simpatía, ¡Un régimen de acaparadores capitalistas
maniobrados por la clerigalla! No le puedo perdonar a Franco el no haber
sabido, en cuanto terminó la guerra civil, reconciliar a los españoles, debiéndonos la
ayuda que le hemos prestado, y el haber tratado como a bandidos a los
antiguos adversarios que estaban muy lejos de ser rojos todos. No es
ninguna solución el poner fuera de la ley a la mitad de un país ,
mientras que una minoría de salteadores se enriquece a costa de todos ... con la bendición del clero. Estoy seguro de que entre los presuntos
rojos españoles había muy pocos comunistas. A nosotros nos han engañado,
porque jamás hubiese yo aceptado, sabiendo de qué se trataba en
realidad, que nuestros aviones sirvieran para aplastar a pobres muertos
de hambre, y para restablecer en sus privilegios horribles a los curas
españoles."
Adolf Hitler.
NOTAS
(1)"Deutsche Kämpfen in Spanien” pág. 17
(2) Adolf Galland "Los primeros y los últimos"
(3) La Cierva "La Historia se confiesa" 291-292 '
(4) Coronel José Gomá. "La Guerra en el Aire"
(5) Ricardo de la Cierva. Opus Cit. pág. 290.
(6) Luis Sol in: "España, Los años vitales” 379.
(7) De la Cierva. Opus Cit. Tomo 111 pág. 298.
(8) Cambio 16 n. 218 del 9/2/1976.
(9) Salvador Rollo: "La aviación española".
(9b) F.Bravo Morata "Guernica, el impulso."
(9b) La Vanguardia dé Barcelona, 15/2/1975.
(10) Sir Arthur Harris "Ofensiva de bombardeo"
(10b y 11) De la Cierva, op. citada. p. 289
(11 b) Castor de Uriarte. Cambio 16 nº 245.
(12) Adolf Galland. Obra citada pág. 35.
(13) B.Crozier ”Franco, crepúsculo de un hombre”
(14) Coronel Gomá: "La Guerra en el aire" 207
(15,16,17,18): L. Bolín; 'Los años vitales".
(20,21,22,23,25): Brian Crozier: "Franco, crepúsculo de un hombre". p.155 a 165.
(26) Thomas y Witts: “El día en que murió Guernica”
(27) Vizcaino Casas: “Viva Franco, con perdón.”
(28) Karl Ries y Hans Ring "Legión Cóndor". 1936-1939. Verlag Dieter Hoffmann. Mainz.
(29) Wilfred von Oven: "Hitler und der Spanische Bürgerkrieg”. Grabert Tübingen 1978.
(30) Vizcaino Casas-. “Viva Franco, con perdón"
(31) Castor de Uriarte en Cambio 16 n.245.
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